JAVIER MILEI PRESIDENTE DIGITAL. Por Juan Francisco Roust, productor televisivo y analista de medios.
Indudablemente, el hecho de haber ganado la presidencia con el 54% de los votos, tras una campaña en redes sociales, hace que Javier Gerardo Milei sea el primer “presidente digital” de la historia política Argentina.
Las redes sociales revelan el humor social, es decir, reflejan el estado de ánimo de las personas.
Pero el estado de ánimo de una sociedad no es la institucionalidad de la misma, sino que el humor social va por un carril y con sus tiempos propios y la institucionalidad tiene una estabilidad diferente y va cambiando transformándose mutando pero en un proceso muchísimo más lento. Una muestra de ello es que a pesar del amplísimo triunfo de Javier Milei y su partido en “la Libertad Avanza”, su representación por ejemplo, en la cámara de diputados y en el senado es escasa y ninguna relación tiene con el enorme caudal de votos que obtuvo. Los tiempos de las instituciones son tiempos lentos, no son los mismos tiempos que los del humor social que es más volátil y ciclotímico.
Así las cosas a Javier Milei esta definición de “presidente digital” engrandece su figura. Objetivamente, el hecho de haber impuesto su figura a través de las redes sociales no solo no le “baja el precio” a la solidez de sus ideas o al sentido de oportunidad de un discurso en el cual la sociedad se vio reflejada e identificada. Por eso el voto masivo, la adhesión y el respaldo social del primer mandatario.
En definitiva, las redes sociales son un reflejo de la sociedad misma, están llenas de vida social. Esa vida está dada por personas reales de carne y hueso que encuentran en las redes un nuevo modo de vincularse, de intercambiar opiniones, interactuar, contar experiencias o dar puntos de vista, compartir situaciones relatos y manifestaciones del espíritu como todo tipo de expresión artística, ni hablar la posibilidad de comunicarse unos con otros de conocerse.
Las redes sociales son tan potentes como vehículo, como contención, como vidriera, que han impuesto una nueva forma de hacer política…UNA FORMA MÁS AMPLIA, MÁS DEMOCRÁTICA, MÁS PARTICIPATIVA Y ABSOLUTAMENTE DIRECTA. INAUGURANDO UNA ERA DE UNA NUEVA RE-PRESENTACIÓN.
Ahora bien indudablemente las redes han tomado este nuevo rol pasando de ser un evento individual y pasatista a medios efectivos de comunicación y se conjuga con prácticas políticas y publicitarias.
El espacio público común vendría a ser la red social en cuestión. Es decir, el metaverso ya está entre nosotros inaugurado por las redes sociales.
(Instagram, Facebook, X ex-Twitter, por nombrar las más conocidas y en las que más presencia de usuarios hay), siendo esta última en la que, puede percibirse, más se
ha introducido la política partidaria del estilo tradicional y la que, a su vez, más ha
ayudado en la construcción y difusión de la opinión pública y la conformación de
agendas diferentes a la de los medios tradicionales.
La política sin intermediación dirigentes con su gente…. El fin de los gerentes de la política y de los intermediarios y los punteros. La inmediatez y la democratización de la palabra y la información son una suma infinita de atributos comunicacionales que anuncian una nueva era. El futuro es hoy. FIN.