{"id":1010,"date":"2021-02-08T18:02:26","date_gmt":"2021-02-08T21:02:26","guid":{"rendered":"http:\/\/tramapolitica.com.ar\/?p=1010"},"modified":"2021-02-08T18:02:26","modified_gmt":"2021-02-08T21:02:26","slug":"bonavena-cuando-suena-la-campana-el-boxeador-queda-solo-hasta-el-banquito-le-quitan-por-jose-narosky","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/tramapolitica.com.ar\/bonavena-cuando-suena-la-campana-el-boxeador-queda-solo-hasta-el-banquito-le-quitan-por-jose-narosky\/","title":{"rendered":"Bonavena \u201cCuando suena la campana el boxeador queda solo; hasta el banquito le quitan\u201d. Por JOSE NAROSKY"},"content":{"rendered":"

\u201cLas altas cumbres suelen estar muy cerca de los abismos\u201d.<\/p>\n

Dec\u00eda el boxeador Oscar \u201cRingo\u201d Bonavena: \u201cCuando suena la campana y se apagan las luces del estadio, el boxeador se queda muy solo; hasta el banquito le quitan\u201d.<\/p>\n

Acaso por esa raz\u00f3n, Oscar Bonavena o \u201cRingo\u201d \u2013como lo apodaban sus familiares-, reneg\u00f3 siempre de los managers y prefiri\u00f3 promover y publicitar \u00e9l mismo sus propias peleas, pagando \u00fanicamente los servicios de un segundo.<\/p>\n

Tal vez porque conoc\u00eda de sobra el medio pugil\u00edstico, comenz\u00f3 su verdadera campa\u00f1a profesional en los Estados Unidos.<\/p>\n

All\u00ed est\u00e1 el dinero grande. Y \u00e9l dec\u00eda textualmente:<\/p>\n

-\u201cEstoy para cosas grandes\u201d.<\/p>\n

Tuvo el mejor autom\u00f3vil, la mejor ropa, viajes, alhajas.<\/p>\n

Eso s\u00ed, sin olvidar nunca su origen humilde, el Parque Patricios, Hurac\u00e1n, los ravioles de Do\u00f1a Dominga, las necesidades de los suyos.<\/p>\n

Ringo no anduvo con medias tintas. Pase\u00f3 sobre un elefante por la Quinta Avenida neoyorquina.<\/p>\n

Tuvo a maltraer a Casius Clay (Muhammad Al\u00ed), siendo este campe\u00f3n mundial.<\/p>\n

Derrib\u00f3 dos veces a Joe Frazier.<\/p>\n

Llen\u00f3 de bote a bote el Luna Park, encendi\u00f3 pol\u00e9micas, fue querido y tambi\u00e9n envidiado. Claro. La envidia es un impuesto al \u00e9xito. Y adem\u00e1s fue adulado y ridiculizado, casi simultaneamente.<\/p>\n

Como todos los personajes que salen de lo com\u00fan, Bonavena habl\u00f3 mucho. Y tambi\u00e9n dio que hablar.<\/p>\n

Hasta que su vida se apag\u00f3 en equ\u00edvocas circunstancias, una madrugada de mayo de 1976.<\/p>\n

El mismo d\u00eda, \u00a1qu\u00e9 casualidad!, V\u00edctor Gal\u00edndez \u2013otro grande del box- en una \u00e9pica demostraci\u00f3n de guapeza venc\u00eda en Sud \u00c1frica a Richie Kates. Es que cuando una luz se apaga otras luces comienzan a brillar. Quiz\u00e1, para que el mundo jam\u00e1s quede en tinieblas.<\/p>\n

Y casi a la misma hora de la corona mundial para Galindez por su triunfo, Ringo mor\u00eda asesinado por un mat\u00f3n a sueldo, a las puertas del Mustand Ranch, en un s\u00f3rdido burdel de Reno, Nevada, por un disparo que le atraves\u00f3 el coraz\u00f3n.<\/p>\n

Despu\u00e9s, p\u00e1ginas y p\u00e1ginas escritas, y numerosas an\u00e9cdotas tambi\u00e9n vinculadas con Bonavena.<\/p>\n

Es que todo lo que rode\u00f3 la vida de Ringo fue distinto, pintoresco, exagerado.<\/p>\n

Ni siquiera su tr\u00e1gico final result\u00f3 com\u00fan.<\/p>\n

La experiencia no se puede comprar, y cuando un hombre o un boxeador la consigue, suele ser tarde para que le sirva. Es que aprendemos a vivir cuando ya hemos vivido.<\/p>\n

Tal vez por eso Bonavena vivi\u00f3 tan de prisa.<\/p>\n

A los 33 a\u00f1os hab\u00eda hecho el viaje de ida y de vuelta. Vertiginosamente. Volando en avi\u00f3n o conduciendo su propio y siempre espectacular autom\u00f3vil.<\/p>\n

 <\/p>\n

La chispa de Bonavena no ten\u00eda l\u00edmites. Tampoco sus ocurrencias y sus extravagancias.<\/p>\n

Y pudo darse todos los gustos, menos ser campe\u00f3n mundial de box.<\/p>\n

Su temperamento desbordante, explosivo, pudo incluso pasar por encima de las barreras de clase, impuestas a su alrededor. Con hombres mas civilizados, que no por eso significa que eran mejores hombres.<\/p>\n

La personalidad de Bonavena apabullaba. En la esquina de su casa y en cualquier pa\u00eds del mundo. En un cabaret o en la Presidencia de la Naci\u00f3n.<\/p>\n

Y no fue casual que ante su cuerpo yacente en el Luna Park, desfilasen miles de hombres an\u00f3nimos, pobladores de la tribuna y alg\u00fan ex primer mandatario, rivales, artistas, periodistas.<\/p>\n

-\u201cNo importa que vengan a silbarme. Lo importante es que vengan\u201d.<\/p>\n

Sin embargo, todos, admiradores y detractores, se conmovieron ante el televisor, aquel 7 de diciembre de 1970, a la medianoche cuando Bonavena concret\u00f3 su mejor actuaci\u00f3n, la enorme haza\u00f1a de sucumbir reci\u00e9n en la \u00faltima vuelta frente a un Cassius Clay, pleno de poder y brillantez.<\/p>\n

Ese d\u00eda, luch\u00f3 hasta el final. Con sus pies planos y sus imperfecciones t\u00e9cnicas. Pero, respaldado por un coraje sin medida que asombr\u00f3 a expertos y legos. Una valent\u00eda \u2013sin obviar sus virtudes que oblig\u00f3 a respetarlo, a comprenderlo y a considerarlo- el mejor peso pesado en la historia del boxeo profesional argentino, salvando quiz\u00e1 la figura de Luis \u00c1ngel Firpo, el famoso \u201cToro Salvaje de las Pampas\u201d.<\/p>\n

Su vida, su ascenso vertiginoso y su muerte prematura,-ten\u00eda solamente 33 a\u00f1os- inspiraron en m\u00ed este aforismo:<\/p>\n

\u201cLas altas cumbres, suelen estar muy cerca de los abismos\u201d.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

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